Seguro que no habéis visto una entrevista igual en vuestra vida. Marina Gold es la encargada de Recursos Humanos. Generalmente estas entrevistas son muy técnicas, con muchas preguntas y bastante solemne. Aquí no va a ser distinto. Tenemos a Marina Gold delante con mini falda y blusa que deja poco a la imaginación. Se conoce que el aspirante abrumado un poco por las preguntas que le sobre pasaban, decidió ir a por todas y callarle la boca metiéndole directamente la polla, una buena polla en la boca. Como Marina Gold es una buena cerdilla, abre la boca bien y se la come entera hasta adentro.
Primero el morlaco lleva la iniciativa, pero todos conocemos a Marina Gold, demuestra su posición de poder, se quita todos los accesorios y ropa que le queda y se ajusta la coleta, es ahí donde sabes que la cosa va en serio y que Marina te va a follar vivo. El chico se deja hacer, ha apostado fuerte y le ha salido bien. Ahora es la jefaza: Marina Gold, la que lleva la voz cantante y le está pegando una mamada de esas salerosas como sólo Marina Gold sabe hacer, bien hasta adentro y contundente de cojones. No obstante esa polla tiene ganas de coño y Marina con el chocho mojado se pone a cuatro con ganas de que le metan el chorizo entero.
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Puede que sea de las entradas a cuatro más heavys que veo desde hace tiempo. El chiquillo está motivadísimo y si tenemos en cuenta los gemidos, acuciantes de Marina Gold, lo está haciendo bastante bien. El coño lo tiene mojadísimo y con cada arremetida le sale hasta el alma por la boca del gusto. Directa de coño a boca, esa polla que todavía está más dura, se prepara para darle más caña. Si quiere el puesto tendrá que currárselo ¿no? En misionero, más a cuatro y bien de culazo vamos a disfrutar del tipazo de Marina Gold ensartado por un buen pollón como nunca antes…
Marina Gold nos la pone dura, hace que nuestra pollas presenten armas y la mano se te vaya a cascártela tienes AQUÍ TODAS SUS ESCENAS con tu suscripción para pajearte a placer.
Las mamadas se van sucediendo entre cada cambio de postura. Marina Gold quiere esa polla bien dura para metérsela entre las piernas a todo lo que de. Se le sube encima a horcajadas disfrutando de ese pollón hasta lo más profundo. Disfrutando ambos con cada arremetida, con los huevos cargados como barriles de brea, no puede más y esa polla enhiesta tiene ganas de disparar chorros de lefa, que salen despedidos hacia la cara y las gafas de la Marina Gold, dejando su cara totalmente cubierta de leche caliente. Vaya follada se han llevado ambos… ¿Habrá conseguido el puesto? Vosotros diréis…
Estas escenas cachondas, calientes, son las mejores para tus ardores pajeriles. No te pierdas ninguna de ellas con tu suscripción, acceso a TODO Putalocura por muy, muy poco.
