¡Vaya par de melones más ricos tiene! Vuelve la mamelluda Quetzal a por más polla, es una venezolana, teen de 20 y pico, que me encanta, nos lo pasamos muy bien follando, conectamos mucho, charlamos un poco para conocerla un poco mejor, siempre intento charlar un poco con ellas antes de entrar a matar, me encanta, me pone cachondo, y Quetzal que ya va mojadita, se me ofrece, despelotada, casi, abierta totalmente de piernas para que veamos bien el culazo que tiene, nos lo abre delante de la cara, es que ¡así no puede ser!
Quetzal es una tetona espectacular, tiene unas ubres mamarias increíbles que me vuelven loco, ya las tienes ahí en primer plano para que no pierdas detalle, además le encanta tragar y eso me gusta mucho, follármela, menearla entre sus tetas, meterla en su chochito, estrechito rico y mojado y ver como gime esta mujer, para ir cargando mis huevos de lefa, y correrme al final que ya no puedo más, una descarga bestial, con sus grumitos que Quetzal se toma como si fuera su lechita del desayuno, es que hemos follado muchas veces y cada vez, me gusta más.
No te pierdas las escenas de Quetzal en Putalocura, son muy morbosas, tiene un cuerpo para el pecado y se lo pasa de puta madre follando…
Tiene una boca deliciosa con una lengua muy muy juguetona que sabe mover muy bien, nos comemos los morros como dos novios mientras me pajea. Me encanta que me la mame, no te pierdas la mamada, es tremenda, imagina tener ahí tu polla en la boca de Quetzal, es una locura, menos mal que tengo tablas y aguanto, porque se sube a que le folle el chocho y aquello chorrea como si hubiera una fuga de agua, va tremendamente mojada, muy excitada.
¡Como me gusta follar en la cama! Es que es como más disfruto, con calma y en todas las posturas que más nos gustan, y bien abiertas de piernas para ti…
Y toma metidas de polla, como cabalga esta jamelga latina, un buen rato arriba cabalgando a nuestro ritmo, disfrutando ambos de la follada, que gozada es cuando sale todo tan natural, yo voy cachondísimo con la polla dura como un mástil y Quetzal, gime con cada metida y tiene el chocho que le chorrea, a los dos nos apetecía mucho follar y como nos lo estamos gozando hamijos… me la pongo a cuatro, porque me encanta como le botan las tetas con cada mete saca, es un espectáculo hipnótico, y maravilloso, unas buenas bufas que delicia es verlas…
El polvo ha alcanzado una calentura tremenda, cuando me pongo en misionero, llevando el ritmo, con Quetzal de piernas abiertas de par en par y yo metiendo barra de polla en todo el chocho a mi ritmo es cuando más a gusto follo para correrme, lo cual llega pronto y Quetzal abre su boquita esperando leche caliente, no puede haber mejor premio para un polvazo de este calibre, la lefa sale a borbotones sobre su carita y su boca y ella se la come toda, es una viciosa y no quiere dejarse ni gota ¡vaya polvazo tremendo!