Asi es como definiria a la rusa que vino el otro dia. Como veis, pura poesia. Y es que la hija de los Zares que tuve el gusto de darle empujoncitos, si, tiene unas potentes tetas, pero esta mas alelada que un chino en el congreso de los diputados.
La rusa vino un dia antes de que me diera el virus ese, asi que ahora es cuando cuento que tal fue con ella.
– Y que tal te fue con ella, Torbe?
– Pues hombre, no me pude quejar, porque cualquier hombre se volveria loco con esas tetas que le cuelgan a la bicha, pero es que metiendole el rabulín, la chica pierde bastante. Se queda como esperando que le den el ticket de compra, asi, mirando, como un oso bobo.
– Entonces, no lo pasaste bien, Torbe?
– Si, el polvo ahi esta, me la follé de varias posturas, la comi la boca, las tetas, y le cogi el culo con la dos manos, acercandolo y alejandolo de mi, para notar su caverna del amor mejor en mi nabo.
– …pero?
– pero que era muy lerda, que no sentia el amor, o el sexo, o como lo quieras llamar. Era como un cuis, callada y reservada. Poco dada a exteriorizar sexualmente sus emociones. Aun asi, le eché un buen cuajo. la marqué como a las vacas con mi portentosa leche. Una mas.
– crees que la gente podrá hacerse una buena paja con ese video que has hecho con ella, Torbe?
– si, me centré en sus tetas, que verlas moverse al compas del metesaca es una delicia, asi que, si te gustan las tetas naturales bailongas, paja asegurada
– pues eso, hamijos, dentro de poco, la escenita estara en la guarripeich, de mientras, a pajearse con el material estatico fotografico.