Gracias a mi oficio del porno, he podido constatar que hay mas de una mujer que lo que verdaderamente le pone es que las peguen e insulten mientras follan. Ojo, que lo hagan mientras se realiza el acto sexual, no antes o despues.
Estas mujeres suelen ser muy bellas y estan hartas que las traten con dulzura, atencion y cariño. Odian el romantiqueo, les regalen flores y que les digan cuanto maravillosas son. En cambio, quieren a un malote que les de caña, les agarre del pelo, y le den unos buenos azotes en el culo. Mientras la llaman zorra y les escupen en la cara.
A que es debido esta actitud?. La palabra se llama Fetichismo. Es una fantasia sexual que ahonda la sumision y las convierte en cautivas. Esa situacion les pone perras perdidas y es asi como se excitan. En los albores de la humanidad, habia gente que tenia que sobrevivir siendo sumisa. Te juntabas a un grupo de guerreros neandertales y te solian echar algunas sobras. De mientras, te follaban uno detras de otro, pero como estabas feliz por sobrevivir, ya que te protegian y te alimentaban, aceptabas de buen grado que te follaran salvajemente. Ser sumisa te daba comida y sustento. Asi muchas mujeres sobrevivieron a nuestros dias, pero claro, en los genes quedó escrito que habia que aceptar ese tipo de sexo, incluso convertirlo en una fantasia. Transcurridos miles de años, algunas mujeres han desarrollado ese fetichismo, que ha ido pasando de generacion a generacion de manera invisible. No saben por que, pero les pone que les agarren del cuello, que las den caña, se ven atraidos por tios grandes y musculosos, por malotes, por tios peligrosos. Esa es mi teoria, y lo veo tan a menudo, que ese tipo de supervivencia se debió de utilizar muchas veces, hasta nuestros dias.
Nota: este articulo es uno de los casi 50 que tendrá mi próximo libro, que llevará el titulo «Sexo Mas Cerdo» y que es la continuacion del famoso libro Sexo Cerdo. Si quieres saber cosas que nadie te cuenta sobre sexo, no te lo pierdas, estará muy pronto en LibrosdeTorbe.com