Dos tetas tiene Patri como dos cabecitas de niño. Dos protuberancias calientes que le cuelgan como si fueran dos jamones. Sus 18 años recién cumplidos nos hacen ver que las nuevas generaciones vienen ya desarrolladitas y con ganas de hacer guarrerídas a tope.
Que suerte la mía el haberme encontrado por la calle con semejante jaca paca. Su escena de Patri Pilladas es mítica. Y ya una vez que la joven ha dado el paso, parece ser que quiere hacer más porno con su tito Torbe.
Una de las cosas que más me gusta de Patri es su tranquilidad y parsimonia. Se toma la vida como hay que tomársela, con 
naturalidad. Sin estreses.
Esos pezones que tiene como galletas María me vuelven loco. El primer día que le toque las tetas pude notar que estaban ardiendo. Eran dos ubres calientes que mi mano no podría cubrir. De ahí el dicho:
mano que teta no cubre, no es teta sino ubre.
Seguro que más de un hijo de la LOGSE que haya suspendido todo porque se pasa el día viendo tonterías en el WhatsApp, no sabe lo que significa ubre. Pero ¿qué más da? Aquí las gentes vienen a disfrutar de lozanas como Patri, que traga leche como si no fuera un ayer.
Espero tenerla por aquí durante mucho tiempo, porque esas tetas no se pueden dejar escapar
