A Urma le gusta follar

¡Y a mi follármela!

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Urma follada en Putalocura

A Urma, quizá todavía no la conocéis mucho, pero yo si, hemos intimado ya en dos ocasiones, vamos que la he pasado por la piedra, y han sido dos polvazos tremendos, épicos y memorables. Urma es una colombianita de 25 primaveras, una teen todavía que refuerza esa imagen morbosa con braquets que te pone a mil cuando te la chupa, pero tiene un cuerpazo espectacular que te la pone como una piedra sólo la ves en pelotas.

Y por ello os traigo estas escenas, Urma está como un tren, tiene un cuerpo delicioso y tremendo, tiene unas bufas tremendas, unas tetazas con unos pezonacos enormes, oscuros, comestibles tremendos y que hace unas cubanas que te podrías correr ahí mismo entre sus tetas, pero te guardas, porque su culo es una escultura y quieres meterte en ese chochito caliente antes de descargar.

Urma es pura pasión, como va de anónima, cuando llevan la máscara se relajan mucho ante la cámara y la follada es maravillosa, como estar en casa en tu cama con tu novia, todo fluye muchísimo, hasta la lefa y los flujos vaginales, todo fluye, y es que Urma nos la pone muy dura con esas curvas que tiene, la chupa como una diosa, lo sabe hacer muy bien, nos confiesa que le venía de serie, es de esas personas que tienen arte para las mamadas, y nosotros disfrutamos de cada pincelada, sin duda…

Es una delicia poder tener semejantes melones a mano, no se por donde cogerlos, son enormes y se me salen de las manos, casi no abarco los pezones con la boca pero son una puta delicia, pero no pierdo comba con el culo y el chocho, le meto los dedos y está mojadísima y es el momento de cabalgar.

Urma tiene mucho ritmo, lo lleva en las venas y cabalga como una amazona, me pone a mil y los polvazos con ella son un disfrute total, una follada riquísima que acaba invitablemente en una buena lefada, en la carita, en la boca, con el rostro de satisfacción de Urma de fondo, una auéntica delicia.

No te pierdas sus escenas en Putalocura, te la van a poner tiesa como un palo y ¡te vas a cascar unas pajas riquísimas!