Deedee es un bellezón del este, me la encontré caminando por las calles de Madrid, y bendito día aquel, vaya bufas más espectaculares me encontré. Las muchachas del este de Europa son muy calientes, yo creo que por allí hace tanto frío que lo combaten follando, en realidad pensadlo, hace tanto frío fuera, que en invierno, cuando es más duro salen poco de casa, lo justo, y las calefacciones van a tope, tanto, que hasta van medio en pelotas por casa, eso y la fricción que también generan calor, pues blanco y en botella lefa en toda la cara, vamos que a follar todo el día.
Además también tenemos que tener en cuenta la edad, esta joven tiene 19 primaveras y el chocho le echa chispas, se lo pasó de puta madre follando la primera vez, le puso muy cachonda, y ahora repite por tercera vez para pasarlo bien con vuestro Tito Torbe. El cuerpo de esta jaca es un espectáculo, tiene unas tetazas enormes, pero enormes, de esas que teta que mano no cubre, no es teta sino ubre, pues dos ubres para amamantar un ejército, con pezonacos de esos deliciosos, marcados cual galleta María que apetece estar todo el día mamando ¡válgame el cielo! una Putalocura de verdad…
La tengo vestida de cerdita y con un conjunto de encaje maravilloso, delicioso, fino, las mamellas se salen del sujetador porque no se puede contener esa fuerza de la naturaleza, las tetazas van directas a mi polla que se pierde entre su valle y me hace una cubana que me deja loco, además la cara de Deedee cachonda, morbosa, acompaña muchísimo. Al poco se mete mi cimbrel que está más tieso que la bayoneta de un coronel hasta dentro, Deedee hace unas mamadas que so de otro mundo, abre la boca a tope y se la mete hasta la garganta, haciendo gagging y aguanta mucho y te chupa hasta los huevos cuando llega abajo, es la puta ostia…
Va mojada, tiene el chocho caliente y se sube a cabalgar con muchas ganas, deleitaos con el maravilloso espectáculo del bamboleo hipnótico de sus tetazas mientras me pega un polvo que me vuelve loco, Deedee es muy cachonda, disfruta mucho, pero mucho follando y eso se nota mucho, parecemos un par de novios con ganas de comernos los morros y todo lo demás y es una maravilla, además tiene un chochito muy rico y apretado que recoge mi polla que es una locura…
Después de follármela en todas las posturas aguanto un poco más y el último esfuerzo antes de descargar toda la leche caliente, que tengo los huevos bien cargados, lo hago metiendo el cimbrel entre las tetas y pegándome un buen meneo, Deedee abre la boca esperando la merienda, me corro y se lo tiro todo dentro, se lo come, con ganas, con gusto y sin dejar ni gota, ni por asomo vaya…
